9 ago 2014

MISERICORDIA Y CONSOLACIÓN

¡APRENDAMOS A CONSOLAR: 2 DE CORINTIOS 1: 3-11 Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, PADRE DE MISERICORDIAS y Dios de toda consolación, el cual nos consuela en todas nuestras tribulaciones, para que podamos también nosotros consolar a los que están en cualquier tribulación, por medio de la consolación con que nosotros somos consolados por Dios. Porque de la manera que abundan en nosotros las aflicciones de Cristo, así abunda también por el mismo Cristo nuestra consolación. Pero si somos atribulados, es para vuestra consolación y salvación; o si somos consolados, es para vuestra consolación y salvación, la cual se opera en el sufrir las mismas aflicciones que nosotros también padecemos. Y nuestra esperanza respecto de vosotros es firme, pues sabemos que así como sois compañeros en las aflicciones, también lo sois en la consolación. Porque hermanos, no queremos que ignoréis acerca de nuestra tribulación que nos sobrevino en Asia; pues fuimos abrumados sobremanera más allá de nuestras fuerzas, de tal modo que aun perdimos la esperanza de conservar la vida. Pero tuvimos en nosotros mismos sentencia de muerte, para que no confiásemos en nosotros mismos, sino en Dios que resucita a los muertos el cual nos libró, y nos libra, y en quien esperamos que aún nos librará, de tan gran muerte; cooperando también vosotros a favor nuestro con la oración, para que por muchas personas sean dadas gracias a favor nuestro por el don concedido a nosotros por medio de muchos. COMENTARIO Cuando recibimos una noticia de un amigo-a de que está enferma o, en casa u hospital, o que con una situación difícil, tal como la pérdida de un familiar; nos quedamos pensando ¿debo llamarla? O espero unos días ¿qué le digo? Le preguntamos a un familiar o a otros, y nos dicen llámala ahora mismo dile que la quieres mucho. Les aseguro que esto es muy significativo, por experiencia propia se lo significativo que es recibir apoyo. siempre debemos responder ante estas situaciones de consolar dar una esperanza en DIOS. Vivimos en un mundo frágil e imperfecto lleno de quebrantamientos y preguntas sin respuestas las cuales algunas son injustas. Si hace una visita y no sabe que decir no se preocupe hable poco y hágalo fundamentado en la palabra de DIOS. CUANDO SU AMIGO-A NECESITE CONSOLACIÓN PÍDALE AL PADRE DE MISERICORDIA QUE LE ENSEÑE QUE DECIR. DIOS NOS CONSUELA PARA HACERNOS CONSOLADORES. Bienvenidos a éste, su blog! Espero sus comentarios.

No hay comentarios: